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sábado, 27 de septiembre de 2014

PASTORAL: SANTO DEL DIA




SAN WENCESLAO 
(907-929)

Duque de Bohemia. Hijo de Wratislao y de Drahomira, era nieto de Borivor, primer duque cristiano y de santa Ludmila. Creció sin apartarse de su abuela, quien le inculcó la fé cristiana.

Al morir su padre, Drahomira se hace con la regencia e intenta impregnar a sus dos hijos el odio hacia el cristianismo, pero sólo Boleslao, el hijo pequeño, hizo caso a la pérfida madre. Enfurecida ésta, ordenó en secreto asesinar a santa Ludmila.

Para evitar mayores conflictos, dividieron el país. A Boleslao le tocó Boleslavia, y a Wenceslao Bohemia..

Wenceslao fué tomado en aprecio por Otón I de Alemania, opción que no gustó demasiado a la madre, por lo que por, todos los medios, le buscó numerosos enemigos.

Restituyó, Wenceslao, la religión cristiana por todos sus estados. Tanto en las visitas que hacía a Alemania como cuando asistía a duras batallas, sus contrarios abandonaban las armas y se tendían a sus pies.

Habiéndole nacido un hijo a Boleslao, éste convidó a su hermano al bautizo, pero a la entrada de la iglesia fué pasado por la espada.

Se le presenta vestido como caballero con armadura, lanza o puñal en una mano y escudo con el águila en la otra.



 

PASTORAL: SANTO DEL DÍA






SAN VICENTE DE PAUL
(1581-1660)

Nacido en Dax (Francia), se formó en Zaragoza y Tolouse.

Recibió la ordenación sacerdotal a los diecinueve años, y a partir de entonces recorrió los caminos consagrándose a la caridad, aunque en princio estuvo destinado en la parroquia parisina de Chilchy.

Fundó la Confraternidad de la Caridad, una comunidaad de hermanas legas. En 1620 le siguió otra comunidad masculina de laicos llamada Servidores de los Pobres. 

Cinco años después fundó la Congregación de la Misión, cuyos miembros fueron llamados lazaristas por encontrarse su sede en la Iglesia de San Lázaro en París. También fundó, junto a Luisa de Marillac, las Hijas de la Caridad.

El centro de su actividad consistió en la preparación de misioneros y la formación del clero.

Murió en la casa de San Lázaro de París, donde se veneran sus restos; su corazón se encuentra en la catedral de Lyon.

Se le considera patrono de huérfanos, presos, de orfanatos, hospitales y todas las instituciones de caridad.